La crónica del Levante EMV
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El Levante UD mantiene el tipo (1-1)
El Levante UD salió ayer con la cabeza alta de Albacete, donde estuvo tan cerca de la victoria como de la derrota. Finalmente, abandonó el Carlos Belmonte con un punto y vistos sus números de las últimas semanas le sirve para alimentar sus opciones de ascenso a la espera de los resultados de hoy.
La mejor noticia es que descarta al Albacete en la lucha por el ascenso y la mala que le faltó algo de ambición para salir más crecido. El dato objetivo que nadie puede discutir es que el Levante UD suma 12 partidos sin perder.
El equipo manchego salió impulsado como un cohete, consciente de que sus opciones de ascenso son cada vez más remotas. Cuenta con una plantilla muy aseada y Parri es su director de orquesta. El valenciano, al que algunos sitúan en el Levante UD la próxima temporada, saltó al campo decidido a amargar la tarde al rival. El conjunto de Mané no tenía tanta prisa, así que decidió esperar en su campo para ver en qué dirección remar. Así se explica como hizo muy poco por llegar al área rival hasta que encajó el gol de Parri, un ejemplo, por cierto, de como hay que llevar el balón a la portería. El centrocampista recibió la pelota, «rompió» la cintura a Alexis y fusiló a Aizpurúa.
Mané juega en función del rival y ayer situó a Manchev junto a Javi Rodríguez en ataque para hacer más flexibles los movimientos defensivos. Fue marcar el Albacete y el Levante UD comenzó a mostrar sus recursos para crear juego. A la primera que decidió trenzar una jugada como es debido, Manchev terminó rematando de cabeza a la red un centro de Juanma desde la derecha. Todo era más fácil, por tanto, de lo que parecía.
El gol no sólo equilibró el resultado, sino la autoestima de ambos equipos. Al Levante UD le fue bien el tanto de Parri para darse cuenta de que no era ningún disparate sumar los 3 puntos y encadenar la cuarta victoria consecutiva.
Covencido anímicamente del triunfo, el Levante UD cogió la pelota con la clara intención de llevar la iniciativa. No consiguió llegar con mucho peligro al área rival, pero al menos comenzó a planificar su estrategia de cara al resto del encuentro: entraba bien por las bandas y Manchev dejó constancia de su facilidad para moverse entre los defensas rivales. A Parri lo ató bien Diego Camacho, mientras la defensa se lo hizo pasar muy mal a los delanteros con el fuera de juego. De la otra gran preocupación, el habilidoso Juanlu, se encargó con cierta solvencia Ceballos, aunque le costara una tarjeta amarilla. La posesión de la pelota pasó a ser del Levante UD en el segundo tiempo, en el que el equipo azulgrana fabricó más juego, aunque las ocasiones más claras corrieron a cargo del Albacete. Si el árbitro hubiese actuado con talante «casero», el Levante UD estaría seguramente lamentando una derrota, porque bien pudo haber señalado un par de penaltis. Riga, mientras, gozó de las dos ocasiones más claras del equipo granota. En la última pecó de cierto egoísmo, lo que seguro le valdrá una pequeña bronca por parte de Mané.
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Alguien lleva tiempo intentando vender a Parri al Levante….......
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Alguien lleva tiempo intentando vender a Parri al Levante….......
Hasta que no se cierre lo de Juanito Sánchez nada que hacer, es un dos por uno.
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Tambien hacen referencia a Riga como senegales. Es ghanes señores, Riga ghanes y N`diaye es el senegales.
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Pues no hay porque rasgarse las vestiduras, pues no conozco futbolista profesional que no se mueva por dinero, y ya me gustaría a mí aprovechar como se aprovecha el Espanyol de lo que deja suelto el Barza. Siempre que sea de calidad me importa un bledo que en su momento oliera a lácteo..
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Seguro que es de agencia.En Marca por Internet,en la cronica,parece que solo ha existido el ALba en el campo.
Albacete y Levante se repartieron los puntos en un partido muy táctico en el que se produjeron pocas ocasiones de gol. Los únicos tantos llegaron en la primera parte en tres minutos.El partido, con un planteamiento táctico por parte de Mané que se le atragantó a los albaceteños, al estar firmemente situados sobre un corto espacio de terreno de juego, impidiendo la fluidez del balón a los locales, y una línea de presión muy adelantada, se rompió a los 21 minutos con una jugada personal de Parri que finalizó en gol.
El futbolista valenciano se internó en el terreno de juego del Levante, alcanzó la frontal del área donde se atrevió a hacer un caño a un defensa, para internarse en el área y batir de disparo raso a Aizpurua.
La reacción levantinista duró tres minutos. En el veinticuatro, Camacho puso un centro desde la derecha, el meta Rubén Martín logró despejar a duras penas, cayendo el balón franco para Manchev que de cabeza y con el meta local en el suelo logró el gol del empate. Tras los goles, el partido volvió a caer en el farragoso planteamiento táctico que pretendía Mané.
Segundo tiempo aburrido
En la segunda parte, el partido perdió tantos enteros como la emoción que ganó por un resultado que en una jugada aislada podía decantar el partido para cualquier equipo.Pocas jugadas se pueden reseñar de este periodo, tal vez la ocurrida en el minuto setenta y cuatro, cuando Ferrón reclamó ostensiblemente un penalti que el colegiado no señaló.
Por lo demás, buenas intenciones por parte de los albaceteños que con más fe que acierto buscaban la portería de Aizpurua, algo que sólo conseguían a balón parado. A dos minutos del final, Santamaría tuvo una gran ocasión para haber marcado, pero su disparo con la zurda se fue desviado.
Al final, reparto de puntos en un partido excesivamente táctico y de pocas ocasiones.