En casa del enemigo
-
En casa del enemigo
Tomás CamposFuimos a derbis y otros partidos comprometidos y no nos pasó nada. Es más, la gente suele ser cortés con el rival.
No hay nada perdido. Yo lo puedo contar. Durante tres meses recorrí todos los estadios de Primera vistiendo la camiseta del equipo rival y no me tocaron ni un pelo. Insultos, claro, y malas caras. Pero eso también te puede pasar en el Metro. Lo verdaderamente importante es que si tú eres respetuoso, lo normal es que nadie se acuerde de tu familia. Grité cada gol de mis equipos, pero nunca insulté a un jugador del rival.
Pero lo mejor fue el trato recibido. Raro fue el estadio en el que no me invitaron a algo. Copa de tertulia tras el duelo del Ciutat de Valencia, un bocata en La Romareda, una cerveza en San Mamés y… ¡una salida nocturna hasta las cuatro de la mañana en Santander! Me pregunto si hubiera vivido todo esto si hubiera ido como hincha local. Sinceramente creo que no. De lo que se deduce que es más fácil encontrarte con un buen samaritano que con un borde que te amargue el día. Así que ¡viva la Liga española!Villarreal 1-1 Levante
@1tvk7k2p:
Derbi regional en El Madrigal.
Llego dos horas antes del partido y aparco tranquilamente a unos 400 metros del feudo amarillo. Hace medio año vibré en estas mismas gradas hasta que el 'parapenaltis' Lehmann nos hundió en la miseria. Hoy luzco una camiseta del Levante. Llego a las taquillas y veo un cartel que aclara cuál es la destinada a los aficionados granotas. Me hago el loco y compro una entrada en tribuna. Falta un mundo para que empiece el duelo y decido tomarme una cerveza en el bar 'La Tribuna', que luce abarrotado de granotas. Cánticos y baño de camaradería a espuertas, pero yo ni canto ni hablo con nadie. Soy un marciano. Los primeros aficionados locales se dejan caer por la zona y todo marcha sobre ruedas. Comunión total. Hay más tensión en una pachanga entre solteros contra casados. De repente aparece Gustavo Reggi y es recibido en olor de multitudes. Algunos aficionados del 'submarino' se fotografían con él. Ni un mal gesto, ni un cántico a destiempo.
Los levantinistas se entretienen poniendo a parir a la televisión autonómica y algunos amarillos se suman con vehemencia. Dentro del estadio las cosas pintan igual. Incluso hay un par de hinchas granotas por la zona. Puestos a correr, al señor de la calva le gano seguro. El partido trascurre sin sobresaltos. Me explayo todo lo que quiero. Aplico el Método Stanislavsky y sufro como un bendito. Kapo no llega por poco. ¡Uo, qué lástima…! La seguna mitad trae buenas noticias. ¡Gol de Camacho! Rujo como un león y saco pecho. Ni una mala palabra. Pero la alegría va por barrios y Jonathan enciende El Madrigal con el tanto del empate. Ahora sí que estoy en franca minoría. Da igual. Las tablas se eternizan y el colegiado pita el final. Me dispongo a abandonar mi localidad y una señora me sonríe: "Al menos nos llevamos un puntito", me dice. Por unos instantes, su ilusión es la mía. En ese momento, lo prometo, soy del Levante
Levante 1-1 Celta
@1tvk7k2p:
Orgullo en el Ciutat de Valencia
Acudo sin el más mínimo resquemor al estadio granota. Sé que me van a tratar bien. Llego a Valencia cuatro horas antes de que suene el silbato y mato el tiempo presenciando el final de un partido del Torre Levante Orriols, un equipo de barrio de la capital del Turia. Victoria local por dos a cero. Las siguientes dos horas son interminables. Hubiera preferido una conferencia sobre la teoría del Big Bang de Stephen Hawking. Para colmo me he olvidado el cargador del móvil en Madrid y tengo la batería bajo mínimos, así que no puedo llamar a los colegas para que me cuenten algún chiste o cómo les fue la noche del sábado. Como a las cuatro y cuarto decido entrar en acción. Me pongo la camiseta del Celta a lo Superman sin que nadie presencie mi transformación y me adentro en el Ciutat de Valencia.
Dos docenas de aficionados vigueses secundan mis deseos de victoria celeste y el buen tiempo reinante me rescata de la depresión. Las huellas del concierto de Bruce Springsteen siguen patentes, pero esta vez el césped no será una excusa. La verdad es que el partido no puede empezar mejor. Golazo de Baiano. Hay un hincha céltico a escasos tres metros con el compartiré miradas y comentarios de complicidad durante el resto del encuentro.
Con el paso de los minutos descubro una singularidad de la afición granota. Resulta que un pequeño sector de su hinchada simpatiza con el Valencia. Aquí la rivalidad está mitigada por las evidentes diferencias deportivas y económicas, aunque llevan a gala su pertenencia a este religión minoritaria que es el Levante, club decano de Valencia. Abundo en el tema cuando Teixeira Vitienes da carpetazo al encuentro. Busco un bar en el que ver al Madrid y me acogen con los brazos abiertos. Tres seguidores locales me invitan a un pacharán y hasta me regalan una pegatina de la Peña Levantinista La Unión, que pasa por ser la más antigua del club. Hablamos de fútbol, de mujeres y hasta de política. Lo siento José Francisco, no soy del Celta, pero el placer de conocerte fue sincero. La pegatina, por cierto, luce en mi escritorio de la redacción de Marca
-
Senzillament precios. Jo crec que no cal afegir res mes. Aixi hauria de ser el futbol. Aixo hauria de ser la rivalitat. Recorde que despres de plorar una barbaritat, anarem a pel nostre vehicle a Mila i al carrer soparem de valent. Ens creuarem amb molts aficionats del Bayern i a tots ells els convidarem a una "picaeta" de productes iberics. Ells eren alemnys, pero no tontos i se cascaren la fiambrera.
Es curios, pero este post no ha tingut fins ara cap resposta. Pot siga perque no hi han insults i per tant no interessa a la parroquia.
-
@XOTO D'ALBALAT:
Senzillament precios. Jo crec que no cal afegir res mes. Aixi hauria de ser el futbol. Aixo hauria de ser la rivalitat. Recorde que despres de plorar una barbaritat, anarem a pel nostre vehicle a Mila i al carrer soparem de valent. Ens creuarem amb molts aficionats del Bayern i a tots ells els convidarem a una "picaeta" de productes iberics. Ells eren alemnys, pero no tontos i se cascaren la fiambrera.
Es curios, pero este post no ha tingut fins ara cap resposta. Pot siga perque no hi han insults i per tant no interessa a la parroquia.¡¡¡XOTO KABRO¡¡¡¡
-
Yo es que no suelo leer mucho este foro, el articulo esta bien pero lo diver sería que hubiera ido a un Betis-Sevilla o a un Barça-Espanyol o incluso al bar de los Yomus en un Xotencia-Levante .. a un Levante-Celta no tiene merito De hecho cualquier que lea el titulo del post creería que iba sobre el xotencia.