Entrevista muy interesante al míster en SUPER
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@3e87ya7r:
Está apostando por un discurso demasiado conservador.
—Nadie me ha pedido luchar por el ascenso. Un equipo que vende a uno de los mejores delanteros de la categoría inicialmente da un paso atrás. ¿El Valencia ha renunciado a Villa? Iba, pero sigue allí. El Real Madrid ha traído a jugadores espectaculares y en nuestra categoría, el Hércules se ha reforzado al máximo. La venta de Geijo es un ejercicio de responsabilidad, una exposición de la realidad, aunque sea una decisión dolorosa.—¿Es tan grande el paso atrás que da el equipo con el adiós de Geijo?
—Creo que la venta de Geijo se produce tarde, ahora no hay tantos delanteros en el mercado. De referencia apenas quedan. Rubén Navarro, Roberto, Rafa Jordá… todos éstos ya tienen equipo.—Mejor venderlo ahora que a finales de agosto como podía haber pasado el verano anterior.
—Lo que pagaba la Real Sociedad por el traspaso (300.000 euros) era una cantidad demasiado baja con respecto a lo que se ha sacado ahora. Diferente era lo de diciembre (unos cuatro ´kilos´), pero López Lara nos dijo que era inviable y que no sólo habría un jugador como Geijo, sino que el proyecto para el año siguiente iba a ser espectacular. El club acertó al no venderlo porque en ese momento sí que hubiéramos estado cojos y sin apenas capacidad de reacción. Ahora espero que salga algo, pero nos estamos moviendo por un tipo de jugador de un perfil diferente a Álex, con más movilidad, más rápido.—¿Ha tenido oportunidad de exponer su opinión en el ´caso Geijo´?
—Siempre he comunicado que vender a Geijo era perder a uno de los tres mejores delanteros de la categoría. Y sólo hace falta ver el esfuerzo que está haciendo Mandiá para tenerlo claro. Pero cuando llega el primer intento del Almería y luego la oferta del Racing, me explican los números y me dicen que realmente lo tenemos que vender. Quizás si la oferta fuera más pequeña no, pero para nuestra economía es una operación necesaria. El club necesita ese dinero, hay que venderlo... y a seguir trabajando.—Con los refuerzos que ahora hay y el bloque de la temporada pasada, ¿a qué aspira el Levante?
—Espero que seamos el equipo competitivo del año pasado. Lo que no podemos es vender la permanencia, ese no es mi objetivo. El pasado ejercicio no sabíamos donde podíamos estar, pero tampoco podemos vender el ascenso. Debemos estar detrás de ese grupo de siete u ocho equipos que tendrá la obligación de luchar por ascender y después intentar ser los mejores de los teóricos perseguidores, y con un poco de suerte nos podemos enganchar con los mejores.—¿La salida del hispano-suizo sirve para ganar en holgura a la hora de reforzar la primera plantilla?
—Sí, pero el presupuesto no varía. Lo que haremos es invertir la ficha de Geijo con el fin de reajustar el proyecto. El problema es que no hay tantos atacantes disponibles, en otras posiciones hay más alternativas. Ya he dicho que obligatoriamente hacen falta dos delanteros, un interior zurdo y un central. Más tarde pueden surgir descartes de los equipos de la Liga BBVA.—¿Tiene claro el sustituto?
—Quiero dos delanteros. Uno tiene que ser de las características de Geijo, un jugador grande, rematador, que aguante el balón de espaldas al área y de presencia física.—¿Tiene prisa por fichar a ese ´9´?
—No hay que apresurarse en la elección, pero si sale mañana, lo quiero. Si al final son cuatro, uno tiene que ser de un perfil similar. A lo mejor no es titular y apuesto por dos delanteros de más movilidad.—Hace un año era una temeridad marcar un objetivo deportivo.
—Ha sido año complicado, muy cambiante, ahora es el momento de más estabilidad desde que estoy aquí. Entré con un Consejo que iba a salir, incluso el presidente (Julio Romero) decía públicamente que se quería marchar. Sus razones tendría. Luego llegó otra directiva que al principio fue un ´boom´ y al final tuvo un efecto gaseosa. Después llegó Quico, con Paquito (Fenollosa), que es el único consejero que se mantiene desde el principio, y los administradores, desde la entrada de la Ley Concursal. Con la gente que he estado he intentado hacer mi trabajo lo mejor posible. Quico quiere cambiar la imagen del club y creo que lo está logrando. Ojalá esta temporada se noté con mayor afluencia de público, que el año pasado terminó siendo muy reducida. Estamos en un momento clave, el del Centenario. Cien años no se cumplen todos los días. Debemos dar una imagen de seriedad y luego sobre el campo quedar lo más arriba posible.—Quedan dudas institucionales.
—Es evidente que aún hay aún varias incógnitas por resolver. Hasta que se produzca lo que se tiene que producir (la salida oficial de Villarroel) hay una estabilidad y la gente está trabajando con criterio. Espero que se solucionen cuanto antes todos los temas, entre otros las denuncias de los cinco jugadores del ERE, para que el club tire hacia adelante. Al final no se irá a liquidación, tengo esa confianza, algún día tendrá que entrar alguien.—Quizás la Ley Concursal supuso una ´buena noticia´ para el Levante.
—Recuerdo aquellos días antes de firmar cuando me informaba sobre lo que era la Ley Concursal porque lo desconocía, sólo lo había oído. Ahora no se están haciendo locuras: o hacer las cosas bien o la ruina. Ojalá venga alguien y se pueda partir a principio de temporada con la obligación de ascender. Si no tenemos que ir construyendo, creciendo con pasos firmes, sabiendo nuestra realidad, porque este club no se debe quitar de su mente la máxima categoría. No hace falta ser el equipo con mayor presupuesto para ascender.—¿Echa de menos algún jugador de los que no siguen en la plantilla?
—En el pasado no te puedes anclar. Los echaré de menos por el grupo que se hizo, un logro que no es fácil. Los que vengan lo tienen que hacer muy bien para suplir a los Pedro Vega, Tena, Geijo, Líbero, Yago, Adrián, Moli y Felipe. Todos aportaron su granito de arena.—¿Cómo va a lidiar con los futbolistas que permanecen y que parten en un escalón inferior para ser protagonistas (Mora y Del Moral)?
—Cada uno es libre para elegir su futuro. Rescindir un jugador también es respetarlo, le estás pagando su contrato. Espero que con su trabajo cambien la posición de partida, para eso están los entrenamientos y los minutos que puedan tener. No les he dicho que no vayan a jugar. Les voy a respetar igual, a todos les exijo que den el máximo. Si deciden quedarse, que cambien su rol, pero que no se sorprendan si en el primer partido están en el banquillo o en la grada.—¿Teme que alguno alce la voz?
—Los que tenemos aquí son buenos profesionales, no lo harán. Por ellos pondría la mano en el fuego, aunque me la queme un poquito.—¿Mantiene el planteamiento de un plantilla de 22/23 jugadores?
—Con Geijo no llegábamos económicamente a mucho más, por eso decidimos compensar el presupuesto quitando un par de fichas. Ahora con ese dinero podemos tener algún futbolista más.—¿Mirando a toro pasado, no renovó demasiado pronto?
—No. En aquel momento también tenía dos propuestas y debía tomar una decisión: o irme o quedarme. Acepté renovar y estoy muy involucrado. Luego salió otra posibilidad (el Hércules), pero hablaron entre clubes y el Levante dejó claro su posicionamiento.—¿Le llamó el Hércules?
—Sólo para que supiese que iban a hablar con el Levante. Preguntaron por Geijo y por mí. Por Álex les remitieron a un precio y en mi caso, a la cláusula de salida.—¿Le quitó el sueño?
—No. El Hércules manejaba otras opciones. Cuando salió ese interés estaba de vacaciones en Oliva.—Hubiera sido un candidato al ascenso a la Liga BBVA.
—Sí, pero uno tiene que sentirse feliz y yo lo soy en el Levante.—¿Es posible que algunos de los refuerzos que restan puedan llegar todavía de Valencia o Villarreal?
—Del Villarreal es muy complicado. Si el filial no hubiera ascendido teníamos cerrados a varios jugadores. Ha sido una lástima porque eran asequibles económicamente y nos hubieran dado un magnífico resultado. Siempre han vinculado nombres del Valencia con nosotros, hemos tenido contactos, pero los que tienen no encajan en nuestras posiciones ni en nuestra economía. También será difícil que algunos de los refuerzos que nos hacen falta vengan de allí.—¿Se le ha pasado por la cabeza algún jugador del Valencia de Emery?
—Hemos descartado a muchos jugadores, de muchos equipos y por muchos factores, pero no podemos cerrar las puertas a nadie.—¿Le haría papel Angulo?
—Es un buen jugador, pero su llegada es muy complicada. Es difícil que jugadores de ese caché puedan venir con nosotros.—¿Ha estado tan involucrado en una planificación como ahora?
—Hacemos un trabajo bastante coordinado Manolo (Salvador) y yo. No hago nada sin su consentimiento, ni él sin el mío, es una manera de funcionar perfecta porque al final los jugadores son los que entrenan conmigo. Eso no me pasaba en el Elche porque Mario Barrera (el que fuera su director técnico) era muy hermético. El primero que hace el contacto siempre es Manolo, yo no llamo a nadie. Pero luego, durante la negociación, una llamada del entrenador a un jugador viendo que realmente lo quiere le puede dar un empujón.—¿Tiene claro los dos jugadores que va a proponer como capitanes?
—Primero se lo diré a ellos.—¿Ballesteros cumple ese perfil?
—Propondré a dos y los otros dos los elegirán los compañeros, como sucedió la temporada pasada.—¿Qué le parecería Xisco Nadal como uno de los cuatro?
—Es un ´pesao´, está todos los días diciendo que quiere ser capitán. Va a hacer campaña y todo, creo que tiene preparados los carteles de su candidatura —ríe—. Ellos eligen a los que quieran. La temporada pasada fueron Gorka y Mora. Volverá a ser una decisión democrática.—Se ha unido a la campaña de abonados sacándose el pase de Tribuna. La pasada temporada habían consejeros que iban de gorra.
—Me hace ilusión que aparezca mi nombre en la camiseta del centenario. Es un bonito detalle para que todo el mundo se involucre y colabore en este año histórico.Otro de los artífices de que el Levante resurja.