Entrevista a Ettien en AS.com

Su cuerpo es casi perfecto. Todo músculo. Impresionante.
Es normal y corriente; no de diez. Y no soy un cachas; nunca hice pesas. Aunque aparento más, sólo tengo 25 años.

Me cuentan que las mujeres le piropean por la calle y le dicen tío bueno.
Aunque lo piensen no me lo dicen. Las mujeres son muy discretas. Las habrá más guapas pero como la mía, Munia de 31 años, no me ilusiona ninguna.

Pero algo golfillo si será.
Mi mujer me controla mucho. Me sabe llevar y tiene mucha paciencia conmigo. Me deja salir pero como la quiero tanto prefiero quedarme en casa.

Los futbolistas famosos siempre estén rodeados de mujeres.
Normal. Son cracks y tienen todo lo que la gente desea. Y si pecan es normal, todos somos pecadores y lo hacemos todos los días.

No saldrá pero a usted le va marcha.
Por supuesto, como a todo el mundo. Hay tiempo para todo: trabajo, familia, marcha. Cada cosa a su tiempo. Pero como ni bebo, ni fumo, si salgo alguna noche es para escuchar música.

Sea sincero, ¿es bueno hacer el amor la víspera de un partido importante?.
Hay opiniones contrarias. Cuando yo lo he hecho siempre me he sentido bien.

Es el jornalero más mediático de su equipo, por eso le han renovado su contrato por dos años.
Mi contrato es muy normalito. Y mi futuro no lo tengo asegurado. Aunque en el Levante soy feliz, algún día jugaré en un grande: Madrid, Barça, Manchester, Arsenal… Quiero llegar muy lejos en el mundo del fútbol y ser una estrella para asegurar el futuro de mi familia. ¡Ojalá pronto pueda cobrar más de 1.000 millones de pesetas por temporada!.

¿Sueña con jugar en el Real Madrid o el FC Barcelona
¿Y por qué no voy a hacerlo?, ¿Y por qué no voy a soñar que un día me fichará Florentino Pérez? Es la ilusión de todos los futbolistas y espero llegar ahí. Además, he madurado y ahora soy mejor futbolista. Pero no me obsesiono y no pido más. Juego en Primera División, en el equipo que quiero y estoy a gusto.

El día 28 de noviembre jugará en el Bernabéu. Buena oportunidad para Florentino descubra su velocidad.
Lo dices en cachondeo. Ese día, si juego, saldré a divertirme y aportaré todo lo que sé. Y como me den espacios...

Esta es su octava temporada en el Levante. Ahora todos le reconocen pero cuando llegó en el 97 lo pasó mal.
Horrible. Si lo superé es porque mentalmente soy muy fuerte. Todo me lo he ganado a pulso: trabajando y con mucho sacrificio. Tras disputar el mundial de Malasia con Costa de Marfil (coincidió con Owen, Aimar y Henry) el Levante pagó por mí 4 millones de pesetas y me ofreció un sueldo de 1.500 euros mensuales. En esos momentos no me importaba el dinero. Sólo quería jugar en Europa y ser profesional. ¡Menudo privilegio!. En la vida se aprende a base de golpes.

¿Tantos golpes le han dado?.
Muchísimos. Ahora tengo muchos amigos pero al principio estaba más solo que la una. De entrada cuando llegué a Valencia con Keita un representante italiano, un tal Maurizio, nos dejó tirados y sin dinero. Por aquel entonces Emilio Cruz era el entrenador y decía que eramos un desastre. Y como no hablabamos español, nadie nos decía nada. Todos nos ignoraban y pasaban de nosotros.

¿Y les trataban despectivamente?.
Sí, seguro. Siempre que estábamos enfermos creían que teníamos el sida, la malaria o una enfermedad muy grave. ¡Es que no nos querían ni tocar! Parecíamos bichos raros. Encima como no estábamos acostumbrados a entrenamientos tan duros, en pretemporada, nos pusimos malos y comenzó el lio. Como no nos conocían todos estaban expectantes. No nos aislaron pero nos humillaron.

¿Y qué les hicieron?
No lo voy a contar pero la experiencia fue muy dolorosa. Como decían que nuestra enfermedad era contagiosa, hablaron con el entrenador para que tomara medidas. Ya estábamos marcados. Nos dejaban estar en el mismo vestuario que ellos pero nos obligaban a ponernos siempre el mismo calzoncillo, el mismo pantalón, la misma camiseta, a utilizar la misma toalla y a comer en el mismo plato.

¿En el mismo plato?
Siempre. Aunque se fregara veinte veces nadie quería comer en el mismo plato ó coger la cuchara y el tenedor que habíamos utilizado Keita o yo. Todo lo teníamos a parte. Fue muy doloroso. Estabamos marcados. Parecíamos dos leprosos.

¿Lloró muchas noches de rabia?.
No porque estaba preparado. Mi sueño era jugar en Europa y sabía que había un poquito de racismo. Por eso como no me fiaba de nadie, siempre estaba solo.

¿Muchos han sido racistas con usted?
Dicen que nadie es racista pero muchos cuando se cabrean te dicen con desprecio corre negro de mierda y, aunque a los dos minutos te pidan perdón, te hacen mucho daño. Una cosa es que un compañero comenté en plan cariñoso oye negro, y otra lo del negro de mierda. Y me lo llaman muchas veces. Soy negro y estoy orgulloso de serlo pero eso sobra.

Por lo tanto Luis Aragonés se pasó tres pueblos (Me cago en su puta madre negro de mierda) con lo de Henry.
Creo que no hubo maldad pero un seleccionador nacional debe cuidar su vocabulario. Yo no le doy importancia pero Henry tiene motivos para estar molesto. Si todos estamos luchando contra el racismo es imperdonable lo que dijo Luis Aragonés.

Por eso ayuda tanto a sus compatriotas.
Si me gustaría ganar 1.000 millones de pesetas es para que a los niños huérfanos de mi país no les falte de nada. Crecí en un orfanato y sé todas las penalidades que pasan. Por eso como me ha costado tanto y tanto llegar arriba, lo poco que tengo, lo valoro

¿Le preocupa lo que está pasando en Costa de Marfil
Es muy gordo y me da pena. Estoy muy preocupado por mi familia: mi madre y mis siete hermanos. No pueden salir de casa. Se arreglará porque no es una guerra civil, es un enfrentamiento con la milicia francesa; es lo que me tranquiliza.

¿Hay mucha miseria en su país?
Un poco de todo pero tenemos muchos recursos económicos, mucha materia prima. Y como todos los políticos de África con dinero y poder se hacen muy egoístas. En vez de proteger los intereses del pueblo, a los 12 millones de costamarfileños, van a lo suyo y a enriquecerse.

Los que le conocen dicen que Ettien es sobre todo una buena persona.
Quiero serlo. Me gusta mezclarme con la gente porque he crecido con ella. Los lujos, como jugar al golf, y las complicaciones no van conmigo. Y aunque me la hagan muy gorda, perdono y olvido. Cada día leo un capítulo de La Biblia para entenderlo todo. Cuando estoy nervioso y tengo malestar leo La Bilbia, me relajo y me concentro mejor. Ya sabe, como dice mi amigo Samuel Etoo para vivir como blancos, debemos correr como negros

METHAL

Se te olvida algo…...........................

Ettien és el dalt, eh ¡¡¡ (només per despistats)

Recollons Vinatea, graçies per diro, ya estava yó dubtant, pensava que era el reçultat de una operaçió y volia feliçitar al metxe.