Pues a mi la actitud de la afición me pareció más que correcta. A pesar de que casi 3000 no pasaron por taquilla y hubiera más de un xoto infiltrado.
Nunca estaré de acuerdo en que se escuhen pitos en el estadio, pero cre que esta vez los que pitaban no era por los jugadores, sino por el árbitro.
cuando oigo a 20.000 almas coreando LEVANTE LEVANTE se me ponen los pelos de punta y se me hace un nudo en la garganta y me saltan las lagrimillas.
Ya sólo pienso en una cosa, que en el partido del ejido podamos hacer INVASIÓ!!!