Hola, después de algún tiempo
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Buenas, después de algún tiempo sin entrar en el foro me he decidido a volver a escribir y primeramente lo haré aquí.
Supongo que muchos no lo sabrán, he estado justamente expulsado del foro por haber insultado a uno de los foreros.
Hecho del que me arrepiento profundamente, pero sobretodo más por el hecho de haber caído en una -para mí-absurda disputa que ni me iba ni me venía, pero en la que caí en la provocación como un benjamín.
Que el Sr. Iborra gane la bota de oro, el mundial, o juegue en 3º división el año que viene, sinceramente me la trae al pairo. Probablemente lo "admire" más como persona que como futbolista, como profesional después de su tragedia familiar y en la manera en la que actuó que como futbolista, como levantinista y defensor de estos colores que como futbolista, pues como tal, doy poca credibilidad. Pero insisto, por encima del futbolista está la persona, su nobleza, eduación, profesionalidad que el Sr. Iborra demostró.
Lo que no me la trae al pairo y en su momento no me la trajo fue que se me utilizara en este asunto para criticarme, confundiendo en todo momento lo meramente deportivo con lo personal, y haciendo mella en un asunto en el que yo viví una situación similar (la muerte de un neonato). Y ahí caí y supongo que perdí los nervios. No quiero que parezca una excusa, mi delito tiene culpa y fui justamente "castigado"…
Pero Lo que sí pretendo con este post es advertir (nunca en el sentido amenazante de la palabra) a quien sea menester, principalmente a moderadores, y en segundo lugar a otros foreros, que hay pequeñas ofensas, quizá encubiertas, palabras de menosprecio (ale vete a dormir, sé un poquito sensato, eres patético, aprende un poco y luego escribe, no seas tal, no seas cual, y un larguísimo etcétera) que sin ser ofensas directas que merezcan apercibimiento o sanción si son provocativas y deberían de algún modo tenerse en cuenta.
Y me sirvo de un símil futbolistico: el de aquel que no para de insultar, pinchar, pegar pequeños golpecitos hasta provocar al adversario que responde poco inteligentemente con una agresión mayor y que es expulsado. Justamente expulsado y sin excusa, mientras que el provocador surge impune.
En el futuro debería tenerse en cuenta. Por mi parte espero haber aprendido la lección, afortunadamente algunos tenemos vida más allá de este foro y me vino bien reflexionar en torno a ello, por el fútbol no vale en exceso la pena discutir, en algunos casos encuentras forofistas en vez de foreros. Trataré de quedarme con los segundos y no caer en la tentación de los primeros.
Un saludo de nuevo a casi todos.
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Encantado de volver a tenerte entre nosotros. Por nuestra parte sólo decirte que, siguiendo el símil futbolístico, a veces es difícil ver las provocaciones, pellizquitos, pisotones,… Intentaremos hacerlo mejor la próxima vez.