Dicen los que saben…
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Dicen los que saben que la diferencia entre ser un top 20 o 30 del tenis mundial a no serlo o al hecho de estar perdido en el puesto 500 de la ATP es el 80% un cuestión psicológica, una cuestión de fuerza mental.
A estas alturas que estamos del profesionalismo en el deporte este hecho es innegable.
De todos los factores de los que se habla en este y otros foros, en las diferentes publicaciones, y en relación con la marcha del equipo, no he encontrado ninguno haciendo alusión a este tema. Corregirme si me equivoco.
Independientemente de la calidad de los jugadores, de la planificación deportiva, del aspecto físico, de la táctica o sistema empleado, el aspecto anímico y psicológico es fundamental y debería ser uno de los principales focos de atención.
El Levante ha perdido ese espíritu guerrero, fuerte, que algunos entrenadores y jugadores, como caso de Luis García o Ballesteros habían inculcado. Los lemas de los pasillos han quedado como cuadros de un museo de antigüedades. Como un recuerdo del pasado.
La pelota no entra en parte, en buena parte, por esto. Verte atrás en la clasificación no debe ser nada alentador. Y creo que los jugadores más allá de ser meros mercenarios sienten esta presión y viven en el día a día en un estado anímico nada positivo, preocupante.
Cuando salen al campo el exceso de ansiedad es máximo y pensar con el exceso de presión es difícil. Lo peor es que el rival lo sabe. El rival sabe que vas el último, que eres débil, que tienes mucha presión y que tarde o temprano cometerás el error.
Estuve en el Madrigal y ayer ente el Bilbao y el equipo lo intentó, lo intentó mucho. Quizá con exceso de ansiedad. Barral falló en el Madrigal una ocasión clarísima, sólo ante el portero quiso asegurar tanto el gol que precipitó que un defensa situado a más de cinco metros en carrera se le echara encima. No, Barral no es malo malísimo. Ni quiero pensar que lo hiciera adrede. Porque ayer volvió a suceder. en un error fatal de la zaga bilbaína se presentó sólo ante Iraizoz y, cuando en condiciones normales hubiese sido un gol sencillo, hizo un pase hacia el punto de penalty erróneo. Presión. Además el equipo salió a muerte, pero a los 30 minutos algunos jugadores ya estaban agotados. Eso es falta de cabeza y exceso de nerviosismo.
Quizá la llegada de gente nueva sirva para airear un poco un vestuario que ahora mismo está enfermo. Gente que aún no ha mamado esta ansiedad en la que estamos inmersos. Ojalá así sea.
Pero lo principal, lo principal, es por desgracia conseguir una victoria para no bajar definitivamente los brazos hasta el final de liga.
Levante….NUNCA TE RINDAS!!!!
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Dicen los que saben que la diferencia entre ser un top 20 o 30 del tenis mundial a no serlo o al hecho de estar perdido en el puesto 500 de la ATP es el 80% un cuestión psicológica, una cuestión de fuerza mental.
A estas alturas que estamos del profesionalismo en el deporte este hecho es innegable.
De todos los factores de los que se habla en este y otros foros, en las diferentes publicaciones, y en relación con la marcha del equipo, no he encontrado ninguno haciendo alusión a este tema. Corregirme si me equivoco.
Independientemente de la calidad de los jugadores, de la planificación deportiva, del aspecto físico, de la táctica o sistema empleado, el aspecto anímico y psicológico es fundamental y debería ser uno de los principales focos de atención.
El Levante ha perdido ese espíritu guerrero, fuerte, que algunos entrenadores y jugadores, como caso de Luis García o Ballesteros habían inculcado. Los lemas de los pasillos han quedado como cuadros de un museo de antigüedades. Como un recuerdo del pasado.
La pelota no entra en parte, en buena parte, por esto. Verte atrás en la clasificación no debe ser nada alentador. Y creo que los jugadores más allá de ser meros mercenarios sienten esta presión y viven en el día a día en un estado anímico nada positivo, preocupante.
Cuando salen al campo el exceso de ansiedad es máximo y pensar con el exceso de presión es difícil. Lo peor es que el rival lo sabe. El rival sabe que vas el último, que eres débil, que tienes mucha presión y que tarde o temprano cometerás el error.
Estuve en el Madrigal y ayer ente el Bilbao y el equipo lo intentó, lo intentó mucho. Quizá con exceso de ansiedad. Barral falló en el Madrigal una ocasión clarísima, sólo ante el portero quiso asegurar tanto el gol que precipitó que un defensa situado a más de cinco metros en carrera se le echara encima. No, Barral no es malo malísimo. Ni quiero pensar que lo hiciera adrede. Porque ayer volvió a suceder. en un error fatal de la zaga bilbaína se presentó sólo ante Iraizoz y, cuando en condiciones normales hubiese sido un gol sencillo, hizo un pase hacia el punto de penalty erróneo. Presión. Además el equipo salió a muerte, pero a los 30 minutos algunos jugadores ya estaban agotados. Eso es falta de cabeza y exceso de nerviosismo.
Quizá la llegada de gente nueva sirva para airear un poco un vestuario que ahora mismo está enfermo. Gente que aún no ha mamado esta ansiedad en la que estamos inmersos. Ojalá así sea.
Pero lo principal, lo principal, es por desgracia conseguir una victoria para no bajar definitivamente los brazos hasta el final de liga.
Levante….NUNCA TE RINDAS!!!!Tienes razon en eso de los tenistas, es como en muchos otros aspectos, y equiparable a todos los deportes. No se los tantos por cientos pero gran parte es eso.
En otro hilo hablo de que si alguien ha escuchado las declaraciones del entrenador y los jugadores. Si alguien las escucha, pero no las del ultimo partido, no lo digo por ese en concreto, lo digo por todos los que llevamos, uno haciendo un poco de abstraccion llega a entender ciertas cosas.
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No, Barral no es malo malísimo. Ni quiero pensar que lo hiciera adrede.
Adrede por supuesto que no, simplemente es MALO. Malísimo no diría tampoco, pero malo un rato. Malo para ser titular, malo porque en más de 1300 minutos jugados ha marcado UN GOL y tiene muchos más fallos y amarillas que goles o incluso aciertos.
No es mi intención señalarle o humillarle, simplemente que como muchos han apuntado ya: BARRAL NO ESTÁ PARA SER DELANTERO TITULAR EN UN EQUIPO DE PRIMERA, es 'malo' para ello.
Y bueno, si anímicamente no está bien o el equipo tampoco… pues lo hace todo peor, pero creo que la materia prima sigue siendo la misma al menos en su caso, y obviamente con la edad va a peor.
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foro-levante-ud/las-inercias-negativas_71741/?hilit=inercias
Lo hablamos en este hilo, pero ya sabes que encontrar hilos puramente futbolísticos es difícil.
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Dicen los que saben que la diferencia entre ser un top 20 o 30 del tenis mundial a no serlo o al hecho de estar perdido en el puesto 500 de la ATP es el 80% un cuestión psicológica, una cuestión de fuerza mental.
A estas alturas que estamos del profesionalismo en el deporte este hecho es innegable.
De todos los factores de los que se habla en este y otros foros, en las diferentes publicaciones, y en relación con la marcha del equipo, no he encontrado ninguno haciendo alusión a este tema. Corregirme si me equivoco.
Independientemente de la calidad de los jugadores, de la planificación deportiva, del aspecto físico, de la táctica o sistema empleado, el aspecto anímico y psicológico es fundamental y debería ser uno de los principales focos de atención.
El Levante ha perdido ese espíritu guerrero, fuerte, que algunos entrenadores y jugadores, como caso de Luis García o Ballesteros habían inculcado. Los lemas de los pasillos han quedado como cuadros de un museo de antigüedades. Como un recuerdo del pasado.
La pelota no entra en parte, en buena parte, por esto. Verte atrás en la clasificación no debe ser nada alentador. Y creo que los jugadores más allá de ser meros mercenarios sienten esta presión y viven en el día a día en un estado anímico nada positivo, preocupante.
Cuando salen al campo el exceso de ansiedad es máximo y pensar con el exceso de presión es difícil. Lo peor es que el rival lo sabe. El rival sabe que vas el último, que eres débil, que tienes mucha presión y que tarde o temprano cometerás el error.
Estuve en el Madrigal y ayer ente el Bilbao y el equipo lo intentó, lo intentó mucho. Quizá con exceso de ansiedad. Barral falló en el Madrigal una ocasión clarísima, sólo ante el portero quiso asegurar tanto el gol que precipitó que un defensa situado a más de cinco metros en carrera se le echara encima. No, Barral no es malo malísimo. Ni quiero pensar que lo hiciera adrede. Porque ayer volvió a suceder. en un error fatal de la zaga bilbaína se presentó sólo ante Iraizoz y, cuando en condiciones normales hubiese sido un gol sencillo, hizo un pase hacia el punto de penalty erróneo. Presión. Además el equipo salió a muerte, pero a los 30 minutos algunos jugadores ya estaban agotados. Eso es falta de cabeza y exceso de nerviosismo.
Quizá la llegada de gente nueva sirva para airear un poco un vestuario que ahora mismo está enfermo. Gente que aún no ha mamado esta ansiedad en la que estamos inmersos. Ojalá así sea.
Pero lo principal, lo principal, es por desgracia conseguir una victoria para no bajar definitivamente los brazos hasta el final de liga.
Levante….NUNCA TE RINDAS!!!!Totalmente de acuerdo.
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Pues un sicologo. En Buñol hay buenos.
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El problema no es que Barral sea malo o malisimo, que es caso. El verdadero problema es la nefasta planificacion que se ha hecho para que Barral acabe jugando partido si y partido tambien de titular.
Eso os tiene que entrar en la cabecita.
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De todo un poco. Yo creo que el estado anímico de la plantilla está tocado. De hecho, no hay más que ver el tremendo bajón que pegó el equipo con el 0-1 del Athletic. El Levante jugó una buena primera parte, pero sin lo más importante, sin gol. En la segunda, nada más empezar Aduriz dió un mazazo moral al equipo. Pero no sólo al equipo, a la afición en general también.
Aparte de la calidad, de la planificación deportiva, creo que hace falta un motivador para saber sobreponerse a estas situaciones de bajón, sobre todo en situaciones como las de ayer, que aunque no fuese lo normal, el equipo en la primera parte dió buenas vibraciones, ocasiones pero sin gol. Obviamente, el bajón no es sólo moral. Pero a falta de calidad la moral hace mucho. Ahora con los fichajes habrá un plus de calidad, pero sin moral mal.
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Hablando de estado anímico, no debe ser muy positivo para la plantilla notar el desespero que tiene la afición por la llegada de Bryan Ruiz. En cierto modo se nos nota una falta de confianza hacia el resto de la plantilla brutal.
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De todo un poco. Yo creo que el estado anímico de la plantilla está tocado. De hecho, no hay más que ver el tremendo bajón que pegó el equipo con el 0-1 del Athletic. El Levante jugó una buena primera parte, pero sin lo más importante, sin gol. En la segunda, nada más empezar Aduriz dió un mazazo moral al equipo. Pero no sólo al equipo, a la afición en general también.
Aparte de la calidad, de la planificación deportiva, creo que hace falta un motivador para saber sobreponerse a estas situaciones de bajón, sobre todo en situaciones como las de ayer, que aunque no fuese lo normal, el equipo en la primera parte dió buenas vibraciones, ocasiones pero sin gol. Obviamente, el bajón no es sólo moral. Pero a falta de calidad la moral hace mucho. Ahora con los fichajes habrá un plus de calidad, pero sin moral mal.
Nada mas empezar no es que Aduriz diera un mazazo moral al equipo, es que un dos minutos hubieran podido haber hecho 3 chicharros. Y el atopinao de entrenador a la que se descuida un poco se le acaba el tiempo y no hace ni cambios.
Es un inutil, parece que haga las cosas en contra del equipo. A ver si se queda sin tirado sin bateria en el coche en Buñol y no viene para el dia del Malaga.
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Hablando de estado anímico, no debe ser muy positivo para la plantilla notar el desespero que tiene la afición por la llegada de Bryan Ruiz. En cierto modo se nos nota una falta de confianza hacia el resto de la plantilla brutal.
Normal, es que no es para menos. Y yo diría que hasta ellos tienen falta de confianza y estarán deseando que llegue alguien con más talento a aportar lo que ellos no pueden.
