14 may 2020, 17:36

@gimnastico_1909 no te cito por no descuadrar esto en exceso.
Vamos a ver, por supuestísimo que en una sociedad compleja como la nuestra existen multitud de facetas en cuanto a la consideración de estratos y clases.
No se trata de que un "comunista de martillo" simplifica los temas. Se trata de un intención de simple pedagogía.
Para entender algunos de esos estamentos no habría más que mirar el abanico de fuerzas políticas que poblaban la Segunda República. Casi todos estaban retratados.
No sé dónde lo dije, pero en un sistema liberal los partidos son representación de clase. Sólo en una hipotética sociedad sin clases tendría razón de ser la no existencia de partidos (ninguno, tampoco el comunista).
Me hablas de veganos, gays, pescadores con caña...(!).
No hagamos caricatura social de la diversidad social. No es algo equiparable.
Soy consciente de que puede parecer simplista lo de explotadores y explotados. Claro que hay matices. Pero son eso: matices.
En lo sustancial, si echamos una mirada de impresionismo sociológico, no se aprecian desvíos que pongan en entredicho que esa lucha de clases existe.
Vale, damos por bueno que soy simple como una ameba y desconozco la teoría marxista. Francamente amic, no se trata de eso. No me planteaba el tema como un ensayo de filosofía social. En las aproximaciones, en post foreros se utiliza la brocha gorda. Ahora bien, se puede dar el paso al pincelito. Lo que sí se agradece es saber a qué se juega y cuáles son las normas.
La realidad es más simple o más compleja dependiendo del punto de vista, pero especialmente del propósito que nos guíe.
A saber: si es cuestión de establecer principios, vamos a la simplificación.
Si es cuestión de desarrollar esos principios, vamos a la complejidad.
Pero nos aclaramos?
Aceptando todo tu desglose, existen clases. No se puede justificar una negación de los conjuntos en virtud de las características de los elementos.
Esto no me lo enseñó ningún marxista sino un maestro escolapio.
Y lo cierto es que si damos por bueno que los análisis pierden su razón de ser en el momento en que se desarrollan sus variables, lo que hacemos es deslegitimar cualquier argumento previo.
Y claro, si eso pasa con el marxismo habría que admitir su validez para otros corpus doctrinales. No? Si el método vale, lo hace aunque cambien los presupuestos de partida.
En definitiva que sí, cuando se bosqueja un análisis socio historico se sacrifican detalles y matices. Pero repito, los detalles, lejos de invalidar el todo, lo enriquece.
Es tan grande el batiburrillo que has pintado de la realidad social (supongo que en algunos casos echando mano del costado humorístico, cosa que celebro y agradezco) que quizá se debería recurrir a algún programa informático para conseguir completar el puzle, ya que tanta arista necesita mucho cuidado.
Lógicamente esto no existía a mediados del XIX porque si bien es cierto que las sociedades siempre han tenido su cierto grado de complejidad, en las últimas décadas se ha disparado la variante.
Lo complejo y lo simple son dos caras de la realidad. De la misma realidad.
Y no voy a entrar en principios de percepción nominalistas, porque ya el lío sería mayúsculo.
Lo que quiero decir y con esto concluyo (por ahora) es que hasta el momento no ha habido ningún relato filosofico-histórico-politico-religioso-artístico que no haya sido sometido a la criba del tiempo, en casi todos los casos como consecuencia de la aplicación de criterios de variedad y complejidad.
Y han cambiado en esencia? Han cambiado en su vertiente existencial?
Son o están?